Reflexiones de un avezado kayakista en sus paseos por el Paraná y sus islas.
Por Carlos Omar Flores
Remando en nuevos paisajes
No es fácil escribir sobre el tema errores, puedo equivocarme. Pero trataré de no hacerlo.
Los hay de distintas áreas y magnitudes.
Durante la tulipomanía en Países Bajos un bulbo de tulipán, el Semper Augustus, fue canjeado por una mansión en el centro de Amsterdam. Podemos pensar que es un error, pero era la moda y motor de la economía en el siglo XVII en ese hermoso pais. La equivocación de un marinero que picó un bulbo de esa variedad pensando que era una cebolla le costó seis meses de carcel.
La ciudad de Río de Janeiro lleva ese nombre porque un marino portugués confundió la bahía de Guanábara con la desembocadura de un río y como estaban en el mes de enero lo llamó así " Río de Enero." Lo acompañaba Américo Vespucio, que aparentemente no lo contradijo.. Supongo que lo hizo desde el barco. Porque si estaban en tierra fue bajo efectos del vino verde que consumen los portugueses.
Cuando escuchamos el término billion (con i) en inglés no debemos confundirlo con billón . El primero es equivalente a mil millones y el segundo a un millón de millones. Para evitar esa confusión billion se traduce con un término creado en el año 1995 y es millardo. Generalmente mis ingresos o deudas no se expresan en esos términos, pero me parece interesante saber la diferencia.
Cuando el irlandés Bono (U2) vino a la Argentina en 1998 dio un recital en el estadio de River Plate. Y comenzó diciendo "Bienvenidos al gallinero" en clara alusión al apodo de gallinas que recibe ese equipo de fútbol. Si una persona no habla español pero tiene esa información y le traducen que la hinchada grita "pongan huevos", podría pensar que se refieren a la oviposicion de esas aves. Que no estaría tan mal porque sería mejorar la producción de un bien de uso comercial. Pero sería un error.
Otra equivocación muy común es pensar que el platino vale más que el oro. Esto fue producto de la innovación que introdujo L. Cartier a fines del siglo XIX. Hizo un reloj de bolsillo para S. Dumont. Para los engastes o engarces de las piedras mayores considero que el oro era discordante y vulgar, en cambio el platino casi no se veía y no se empañaba como la plata (aún existe el modelo Cartier Dumont). La incorporación de este metal en joyería fue aceptado por el público. Y además cuando algún intérprete vendía más de un millón de discos crearon, como premio, el disco de platino, supuestamente superior al de oro.
Quizás el yerro más grande fue la creación del metro como unidad de longitud.
En Francia existían, en el siglo XVIII cerca de 250.000 (no es un error ni exageración) unidades de medida para peso, longitud, área, etc. No era mala idea definir una nueva unidad de longitud, que fuera aceptada por todos. Y definir las demás en base a esa, por ejemplo el volumen
Para ello decidieron crear una unidad de longitud que llamaron metro. Lo definieron como la diezmillonesima parte de un cuarto del meridiano terrestre. Pero para eso tenían que medir ese meridiano Esa misión se la encomendaron a P. Mechain y J. Delambré, que trabajaron por separado durante casi siete años. Uno por el norte y el otro por el sur. Tenian que medir la distancia entre Barcelona y Dunkerke e inferir la cuarta parte del meridiano Esto se parece a una historia que interpreta Les Luthiers, en la que dos personas deciden componer una zarzuela y trabajan separados durante seis meses. Y al reunirse comprueban , con cierto disgusto, que ambos habían escrito la letra. Fue ahí que contrataron a un músico que llamaban "El Cervantes de la guitarra", porque era manco.
Volvamos a los franceses. Mechain después de pasar vicisitudes (casi muere en un accidente) se dio cuenta que su medición tenía un error, pero empezar de nuevo probablemente le consumiría lo que le quedaba de vida. Ergo decidió dejarlo así. Por lo tanto la barra de platino e iridio que representa al metro patrón tiene un error de 0,2 mm. Que en 100 Km son 20 metros. Si pensamos que el instrumental de los aviones de pasajeros está calibrado con esta unidad antes de subir se nos frunciria por lo menos el ceño.
En 1960 se definió un patrón atómico. Es 1.650.752.63 veces la longitud de onda en el vacío de una de las transiciones (entre los niveles 2p10 y 5 d5) del átomo de kriptón 86. Seguramente fue para que todos pudieran tener esta información al alcance de su mano. Errores detectados en la línea espectral del kriptón hicieron que en 1983 se defina al metro como la distancia recorrida por la luz en el vacío durante un lapso de 1/299.792.458 de un segundo. Asumiendo que la velocidad de la luz es 299.792.458 metros/segundo. Es decir vuelven a usar la definición de metro, ya que la velocidad está medida en m/s. O como diría mi abuelo " De vuelta la burra al trigo".
Este tema da para mucho más pero no quiero aburrir a quien tuvo la paciencia de leer mi ensayo.
Cualquiera se equivoca , dijo un gallo y se bajaba del plumero.
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