miércoles, 2 de marzo de 2011

La falta de reconocimiento aleja a los científicos de la divulgación

Por Ángel Díaz

Las nuevas generaciones consideran que explicar su trabajo a la sociedad forma parte de sus obligaciones profesionales, pero muchas veces no encuentran la forma de hacerlo. En los países europeos donde más se innova se generan menos recelos entre los investigadores y los medios de comunicación.


En los últimos años, la presencia de la ciencia en los medios de comunicación, ya sea en forma de divulgación o de debate político, ha aumentado considerablemente, pero aún está lejos de alcanzar el peso que se le concede habitualmente en nuestras vidas, en la transformación de la sociedad y la economía.

La brecha que separa a los investigadores del público sigue abierta, y hay quien opina que lo estará hasta que se pueda hablar de ciencia como se habla de otras áreas que también requieren de un conocimiento muy específico, como son el deporte, la economía o el arte moderno. Quizás el problema estribe en que la ciencia no es sólo un lenguaje, sino también -y sobre todo- una forma de ver el mundo.

Un estudio de la Comisión Europea, en el que participaron investigadores de todas las edades y casi todas las nacionalidades del continente, reveló que todos los profesionales de la ciencia se muestran unánimes en que sería deseable «una relación continua y más profunda con los medios, para que el público se dé cuenta de que la ciencia se basa en adquirir nuevos conocimientos y satisfacer la curiosidad, no sólo de invenciones y nuevos productos».

«Una cosa es el conocimiento científico y otra cosa es el pensamiento científico», indica Eudald Carbonell, profesor de la Universidad Rovira i Virgili y codirector del yacimiento de Atapuerca.

«No sólo hay que contar que se ha descubierto algo, sino también explicar por qué es importante, a dónde te lleva ese conocimiento», aclara el antropólogo, quien no cree tanto en la idea de divulgación -por ser «banal»- como en la necesidad de integrar el concepto de ciencia en el sustrato mismo de la sociedad. «Cuando rompamos la barrera entre conocimiento y pensamiento, la ciencia será como el fútbol, formará parte de nuestra cultura», añade.

Javier Armentia, astrofísico y director del Planetario de Pamplona, explica que «el reto está en pasar de la información a la reflexión». Pero, ¿por qué es tan difícil dar este paso? «La información económica requiere mucho más esfuerzo, y los toros también tienen su propio lenguaje», comenta Armentia. «El problema es que se ha claudicado, se dejado la ciencia como algo que hacen los científicos».

Lo curioso es que, en contra del mito del científico en su torre de marfil, muchos jóvenes investigadores no se sienten cómodos con este estatus. «La gente es consciente de la importancia de la ciencia, incluso la admira, pero pone una distancia», lamenta Santiago Rello Varona, del Instituto Gustave Roussy, en Francia.

El mencionado estudio europeo, publicado en diciembre de 2007, también señalaba una diferencia fundamental entre los investigadores más veteranos y los más jóvenes, éstos últimos mucho más acostumbrados, y también más proclives, a relacionarse con los medios. Pero el esfuerzo por comunicar no siempre se ve recompensado: escribir un ensayo divulgativo, mantener un 'blog' o colaborar con la prensa no puntúa oficialmente en la carrera del investigador. Y, aunque se quiera hacer, no siempre es fácil saber qué palos se han de tocar.

«La falta de una financiación específica para comunicación, la falta de tiempo y las dificultades de encontrar un lenguaje sencillo para comunicar clara y efectivamente a audiencias más amplias son subrayados como los mayores obstáculos desde la comunidad científica», concluía el estudio de la Comisión Europea.

«Hay científicos que no tienen interés en comunicar porque piensan que a la sociedad no le interesa, y hay otros que no encuentran la manera de realizar esa comunicación», resume Carbonell.

Además, la vorágine de publicaciones, tareas de docencia y obligaciones burocráticas varias no deja mucho tiempo para una actividad considerada secundaria. Todo lo cual redunda en que la sociedad perciba el saber científico como una serie de nociones más o menos lustrosas, y no como el modo de discurrir y asomarse al mundo en el que quieren verse reflejados los científicos. «En nuestro país, parece que el documental es sinónimo de ñúes cruzando el río para llegar a las llanuras bajo el acecho de lobos y cocodrilos», ironiza Rello Varona.

En todo caso, la divulgación no es sólo una obligación del científico hacia la sociedad; aprender a comunicar es también, en cierto modo, aprender a organizar las propias ideas, lo cual conecta con un concepto fundamental para Carbonell: «Los científicos 'senior', que llevamos toda la vida investigando, tenemos que hacer este aprendizaje, debemos convertir en pensamiento lo que nuestra experiencia ha acumulado como conocimiento».

Otra de las tesis que reflejaba el citado estudio es que en los nuevos países miembros ('UE 12)', la desconfianza de los científicos hacia los medios, por miedo a que se politicen o banalicen los temas, es mayor que en la Europa de los 15; lo cual da una idea de que, cuanto más importante es la ciencia en un país, mejor se comunica y menor es la brecha entre sociedad y laboratorio.

En España, tal y como recordaba la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, hemos experimentado en los últimos años el segundo crecimiento más rápido del mundo, sólo por detrás de China, y ya somos la novena potencia científica mundial. Sin embargo, es evidente que aún hay desajustes, como muestra el hecho de que nuestras universidades están muy lejos de ocupar esas posiciones. En comunicación de la ciencia, como en todo lo demás, ocurre que hemos mejorado muy deprisa pero aún nos queda mucho por aprender.

«Muchos científicos miraban a los que sí divulgaban como una especie de 'vedettes' que sólo querían lucirse», comenta Armentia, quien reconoce, sin embargo, que «las nuevas generaciones, tanto de comunicadores como de investigadores, creen que divulgar la ciencia es parte de su trabajo».

Sin embargo, aún se acusa en nuestro país cierta dependencia del mundo anglosajón en la elección de informaciones científicas, lo cual no sería tan problemático si no fuera porque se pierden algunos fundamentos básicos de la comunicación: «Una mayor presencia española daría una sensación de cercanía, se podría enmarcar la divulgación en un contexto humano», señala Armentia. Esta lejanía se acentúa, a menudo, en el caso de la investigación universitaria: «Es más pausada, menos espectacular y más analítica, y por eso le cuesta más llegar al gran público», argumenta Rello Varona.

Fuente:
www.madrimasd.org/

sábado, 26 de febrero de 2011

Carta abierta de un científico sin complejos

Por Arturo Quirantes

Soy profesor de Física en la Universidad de Granada. Mi investigación se centra en el estudio de aerosoles atmosféricos mediante técnicas de dispersión de luz. Mis aficiones incluyen Internet, la criptografía y leer como un cosaco. Y además me ha picado el gusanillo de ser mejor profe, que ahora que viene Bolonia hay que ser innovador, chachipiruli y de calidad. Eso me ha impulsado a crear un proyecto docente para enseñar Física mediante ejemplos de películas de todo tipo. Y encantado de la vida.








Algunos políticos creen que el único motivo de la ciencia y la tecnología es crear nuevos procesos productivos, nuevas empresas, nuevos puestos de trabajo.  Creen que algo llamado “ciencia aplicada” se lo puede conseguir, y que es como un café de máquina: se echa una moneda, y a los pocos minutos tienes la bebida calentita en el vaso.
 

Como contraposición, se inventan una cosa llamada “ciencia básica”, que para ellos suele ser todo lo que no tenga aplicación productiva inmediata.  Amazings todavía colea con los comentarios de Sarah Palin: “Las subvenciones se van en investigaciones que no sirven para nada, como esos estudios con la mosca de la fruta…“  Por supuesto, si luego llega una plaga de mosquito tigre a su Estado y necesita saber cómo combatirlo, esos estudios que no sirven para nada le vendrán de perlas, pero mientras tanto, queda bonito eso de erigirse en adalid del despilfarro.

Aquí no tenemos a Sarah Palin.  Tenemos algo peor.  Se llama Cristina Garmendia, y es Ministra de Ciencia e Innovación.  Dejando aparte que el nombre de su ministerio es una redundancia, esta señora se ha quedado a bien publicando un artículo titulado por una ciencia de calidad y sin complejos, donde desarrolla una curiosa teoría.

Según ella, los científicos españoles somos unos quejicas.  No nos basta con los aumentos presupuestarios descomunales de los últimos años, queremos más y más. Y si no, nos enfadamos.  Menos pucheros y más convicción, nos dice.

Pero como los toros se ven distintos desde la barrera, permitan que este humilde físico les de su opinión.  Tranquilos, no les voy a llorar con mis penas personales.  De hecho, soy Profesor Titular de Universidad, esto es, con plaza fija, lo que me convierte en un privilegiado en mi entorno.  No les hablaré de esos chicos y chicas que sueñan con un contrato Ramón y Cajal, una prórroga de su beca, un año más para acabar la tesis.  Sus historias son conmovedoras, pero no van por ahí quejándose.

No, aquí hemos venido a hablar de la Ministra, quien en su artículo afirma que el gasto de I+D se duplicó en España entre 2005 y 2008.  Me pregunto adónde habrá ido a parar todo ese dinero.  Miro a mi alrededor, y ni mi Departamento es dos veces mayor, ni los investigadores cobran el doble, ni tienen dos veces más material de laboratorio.  Quizá se haya disipado en tiempo perdido; en burocracia inútil; en más y más vicerrectorados, viceconsejerías, vicesecretarías y vicevarios; en pagar facturas atrasadas que debían haberse abonado a tiempo; en investigación militar (¿sabe, querida Ministra, lo que nos ha costado el A400M, o el Eurofighter?  pues averíguelo); en formar a profesionales que luego toman la puerta por falta de oportunidades, o que sencillamente vuelven a sus países de origen.

Habla usted, Ministra, de colocar a nuestros científicos en Europa, lo que resulta magnífico para ellos, y muy triste para nuestro país, porque no podrá disponer de ellos.  Muchos de ellos tuvieron que tomar la senda del Vente a Alemania, Pepe, y cuando políticos como usted les convencen de que vuelvan, bien que se arrepiente más de uno al comprobar que algunas cosas no cambian.

Mejor sería que no tuvieran que irse, y que fuesen los de fuera los que vinieran aquí.  Pero es que ni siquiera podemos retener a los talentos extranjeros. Tuvimos en mi Departamento a un argentino que era un McGyver, tuvo que irse a Austria con sus patentes.  Ahora trabajamos con investigadores de Polonia, México, Rusia, Argentina.

Yo he tenido alumnos de Islandia, de Marruecos, de Finlandia.  Todos ellos, después de investigar con cargo al enorme presupuesto de I+D de que usted se enorgullece, tendrán que volverse a casa porque aquí no hay trabajo para ellos.  Los queremos aquí, pero no podemos albergarlos.  Será en sus respectivos países donde dará fruto su preparación.  Hablar de la fuga de cerebros no es, como usted dice, insultar a los investigadores de prestigio que trabajan aquí;  es insultar a los investigadores de prestigio que NO trabajan aquí, porque han tenido que irse.

Dice usted, Ministra, que la sociedad tiene una percepción negativa sobre el estado de nuestra I+D.  ¿Conoce usted el Informe 2008 sobre Percepción social de la ciencia?

Huy, qué tonto, claro que lo conocerá, si lo hizo su propio ministerio. Debería leérselo, porque aprendería mucho.  Resulta que los ciudadanos den a los médicos y científicos la nota más alta de valoración: 4,2 y 4,1 sobre 5, respectivamente.  Me gustaría pensar que usted creía que la nota máxima era un 10, y por eso nos habían suspendido.  Le diría cuál es la nota que sacan los políticos, pero ¿para qué sonrojarla?

Parece que usted se ha quedado con el párrafo en el que los ciudadanos consideran que la principal motivación de un científico es la propia ilusión por la ciencia.  Resulta el argumento más cómodo para el que tiene que repartir el dinero.  Y la verdad es que es cierto.  ¿Cuántos científicos ricos conoce usted, Ministra?

Yo aún tengo que encontrar una sola persona que me confiese que, si se metió a científico, era por pegar el pelotazo y retirarse al Caribe.  La Ciencia es una profesión que no te enriquece salvo espiritualmente.  Te llena el alma, te da ilusión, te hace ver que realmente puedes marcar la diferencia en un oscuro laboratorio o en un almacén de becarios sin ventanas.  Lees que una investigación en la que has participado ha ayudado a limpiar el cielo de Madrid, o a aumentar la esperanza de vida de los que sufren cáncer, o a crear un motor de explosión que consume un poco menos, y piensas “eh, yo he ayudado un poco en eso.”  Miras por la ventana, inspiras hondo.  Y, por un momento, te sientes el rey del mundo.

Muchas veces, si el éxito llega, es porque aceptamos como hecho consumado el tener que trabajar sin medios, con presupuestos que nunca llegan, en las condiciones que sean.  Somos expertos en hacer más con menos.  Si no tenemos grapas, las traemos de casa.  Si el ordenador del laboratorio es de la época en la que Bill Gates gateaba, lo usamos igual.  Mi primera mesa de trabajo fue un tablero de dibujo en una esquina de un laboratorio atestado de productos químicos. A veces usamos material que ya era antiguo cuando usted estudiaba las cuatro reglas.

¿Cómo se atreve usted, Ministra, a acusarnos de victimistas? ¿Y qué derecho tiene usted a restregarnos en la cara el ejemplo de Cajal, a escudarse tras sus méritos, a apropiarse de su memoria para mayor gloria de su Ministerio?  Don Santiago fue uno de nuestros ilustres científicos, sí.  Premio Nobel, sí.  Investigador ejemplar y ejemplo para los investigadores, sí.  Y todo eso no lo consiguió por ser español, sino a pesar de ser español.  Tuvo que costearse su primer microscopio de su bolsillo.  Hoy, muchísimos investigadores de gran talento no pueden acceder a un contrato Ramón y Cajal.  Los afortunados que lo consiguieron se desviven pensando qué pasará cuando se les acabe, dónde podrán desarrollar sus estudios, cuándo podrán ver cumplido su sueño de contribuir al desarrollo de la Ciencia española y compatibilizarlo con hechos tan mundanos como llegar a fin de mes.

Porque Ministra, nosotros no vivimos del aire.  No somos los típicos científicos de película, demasiado abnegados para darse cuenta de que en el frigorífico solamente hay un cartón de leche caducada.   Pero le diré una cosa, Ministra.  El día que nos veamos en esa situación, nos beberemos el cartón de leche y seguiremos en la brecha; y cuando se nos pase la gastroenteritis, volveremos al trabajo.  Y los que tienen la suerte de contar con los recursos de Empresas Stark, no es que sepan construir un Iron Man, es que nos hacen todo un escuadrón.  Dos escuadrones, si pueden evitarse el papeleo de las subvenciones.

Las palabras que usted nos cita de don Santiago Ramón y Cajal, eso de que la investigación científica en España es cuestión de abnegación y sacrificio, ya nos las sabemos.  Esa es una lección que tenemos muy bien aprendida.  No necesitamos a ninguna ministra para que nos las recuerde.

Fuente:
http://amazings.es/2011/02/25/carta-abierta-de-un-cientifico-sin-complejos/#more-2236

¿Cómo se ve su carrera en Hollywood?

Por Larry Buhl – Yahoo.
Traducción de Claudio Pairoba




Si Ud. mira películas, seguramente habrá notado que algunas profesiones aparecen con mucha mayor frecuencia que otras. Algunos campos (detectives, periodistas y prostitutas, por ejemplo) están sobrerepresentadas, mientras que otras no aparecen por ningún lado. ¿Cuándo fue la última vez que Ud. vió una película sobre las peripecias de, digamos, un Ingeniero en Redes?

Y con frecuencia los guionistas usan estas profesiones como una forma de definir rápidamente a sus personajes. Si bien hay excepciones, muchas películas – incluso las más grandiosas – han usado ocupaciones como atajo para “tipos” de personalidad. Eso está bien a menos que sea su profesión la cual sigue apareciendo – de forma negativa. Nota personal para Hollywood: no todos los periodistas son bebedores empedernidos que se arriesgan a todo y que no pueden mantener relaciones saludables.

Aquí vamos con algunos de los estereotipos laborales más comunes en el cine:
Si un personaje masculino principal es inteligente, sensible, atractivo, apasionado y sobre todo un gran partido, él posiblemente sea un arquitecto.

A diferencia de la gente que trabaja en otras ocupaciones creativas, se asume que los arquitectos son financieramente estables y prácticos. Robert Osborne, el conductor de Turner Classic Movies, dice que los arquitectos están, supuestamente, “más allá de todo reproche y no contaminados como los abogados, jueces e incluso los médicos”. Los arquitectos son tan “cool” que el personaje de Matt Dillon simuló ser uno en Algo sobre Mary. En la película The Fountainhead, cuando Dominique, interpretada por Patricia Neal, se desespera porque nunca va a tener a Howard Roark, interpretado por Gary Cooper, le dice “Ojalá que nunca hubiera visto tu rascacielos”.

Vean tambiéSleepless in Seattle, Indecent Proposal, The Lake House, Intersection, Jungle Fever, The Last Kiss, Breaking and Entering, Love, Actually and My Super Ex-Girlfriend. Giro: arquitecta en One Fine Day.

Si un personaje principal es inteligente, con tendencia al cambio, idealista y un luchador por salvar a la sociedad de a una persona a la vez, entonces puede que sea un maestro. Incluso el maestro adicto a las drogas interpretado por Ryan Gosling en Half Nelson estaba comprometido en ayudar a los estudiantes.
Ver también Stand and Deliver, Dead Poets Society, Dangerous Minds, Lean on Me y Mr. Holland's Opus. (Excepciones: Teachers, Election.)

Si un personaje principal femenino es adicta al trabajo y solitaria, es probable que sea una mujer de negocios. Será fría y ácida pero se enternecerá cuando conozca al hombre correcto. Este es un cliché que molesta a Billy Mernit, novelista y autor de Escribiendo la Comedia Romántica. “Estamos estancados con esta noción simplista de que una exitosa mujer de negocios es fría y calculadora o que solo necesita un hombre para ser felíz,” dice. “Es sexismo escrito en letras de neón.”
Vean también Network, Baby Boom, The Devil Wears Prada y The Proposal.

Si un personaje principal vive torturado, es inmaduro, autodestructivo y centrado en si mismo, seguro que es un artista, un músico o un cineasta. Vean Pollock, Crazy Heart, Letters to Juliet and Adaptation.
Si el personaje principal es un luchador incansable del bien (o del mal), será un abogado, fiscal de distrito o periodista. Vean Presumed Innocent, A Few Good Men, JFK, The Verdict, Michael Clayton, State of Play, Zodiac and The Devil's Advocate. (Excepción el torpe abogado de Mi primo Vinnie.) Giro: secretaria legal con una misión en Erin Brockovich.)

Si el personaje es un bobo convencional, será un contador. El personaje será el centro de las bromas o se embarcará en una arriesgada aventura que revelará su lado salvaje. Vean Midnight Run, Stranger Than Fiction, Date Night, Dinner for Schmucks. (Giro: el tonto liquidador de seguros con un lado muy oscuro en Fight Club.)

El crítico de cine Dan Hudak en cierta medida entiende a Hollywood en su uso de ocupaciones como atajo. “Las películas tienen una cantidad de tiempo limitada para transmitir información, así que si los cineastas pueden mostrar como es su personaje en una o dos escenas, lo harán,” explica. Hudak cree que las series de TV están en mejor posición para mostrar ambientes de trabajo más realistas dado que tienen tiempo para desarrollar sus relaciones y lo que pasa en el lugar de trabajo.

Las películas sobre oficiales de policía, detectives y abogados criminales naturalmente llevan a tener acción e intriga en la pantalla, y nadie quiere pagar 10 dólares o más para mirar gente sentada en una sala de reuniones discutiendo como arreglar fallas en el software. De todas formas, FX Feeney, guionista y crítico cinematográfico de LA Weekly cree que Hollywood podría y debería pensar un poco más en mostrar una variedad de ocupaciones más amplia de una manera realista y entretenida. “Creo que no se celebra el trabajo lo suficiente (en las películas),” dice. “El trabajo forma parte del significado de la vida tanto como el amor. Lo que nos falta en muchas películas es tener una mirada de la vida real.”

Hudak dice que hay otra razón por la cual vemos tantos estereotipos en las películas. “Las películas comerciales tienen una mayor tendencia a reafirmar las creencias de la sociedad acerca de las profesiones antes que cuestionarlas,” dice. “Lo familiar crea dólares en la taquilla y viceversa, así que mientras la gente siga yendo a las películas sobre contadores aburridos y arquitectos románticos, vamos a seguirlos teniendo.”

Fuente:
career-advice.monster.com

viernes, 25 de febrero de 2011

Miradas alternativas sobre combustibles alternativos (Segunda parte): El enfoque de investigadores de la UNR

Los aspectos actuales y las perspectivas futuras de la producción de Biocombustibles son analizados por el Dr. Ing. Sergio Montico y su grupo de investigación de la Facultad de Cs. Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario, Argentina.

El enorme potencial de los biocombustibles requiere de un análisis crítico.
Por Claudio Pairoba

El Dr. Ing. Sergio Montico es titular de la Cátedra de Manejo de Tierras de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). Montico y su grupo vienen trabajando en el tema de la gestión energética en el sector rural desde el año 2004. Durante la Jornada “Aportes para el análisis de la sustentabilidad de los Biocombustibles” que se llevó a cabo el 3 de Noviembre de 2010 en la UNR, Montico manifestó que "resulta sumamente importante analizar la eficiencia energética de los sistemas productivos agropecuarios representativos de la región en diversos escenarios ambientales. La transformación de la producción primaria en biocombustibles, integrados en una cadena agroenergética, es una cuestión controversial" (1).

miércoles, 23 de febrero de 2011

Morphine, Weapons on U.S. Air Force Plane Trigger Complaint From Argentina

By Eliana Raszewski - Feb 15, 2011 

 
Barack Obama's upcoming Latin America tour will not take in Argentina, a decision which has strained relations. Photograph: Alex Wong/Getty Images


Relations between Argentina and the U.S. worsened after the South American country filed a complaint about a U.S. Air Force plane it says arrived in Buenos Aires with “suspicious” material for a police training exercise.

“So far neither the U.S. Embassy nor its government have given satisfactory explanations to clarify the presence of non- declared cargo,” the Foreign Ministry said in an e-mail statement last night. Foreign Minister Hector Timerman said the cargo on the plane, which arrived Feb. 10, included weapons, communications equipment and expired morphine.

Police and customs officials at the Buenos Aires-based international airport seized 1,000 cubic feet of material that wasn’t included on a list that the U.S. provided to the government in December, according to the Foreign Ministry. U.S. State Department spokesman Philip J. Crowley said the cargo was “fully coordinated” with Argentina.

The dispute over the military plane comes after President Barack Obama decided against visiting Argentina during his first South American trip next month and after diplomatic cables released by WikiLeaks, an organization that publishes secret documents on its website, suggested corruption among members of President Cristina Fernandez de Kirchner’s Cabinet.
 
Relations ‘Strained’
The plane’s cargo was to be used in a police course on hostage rescue, Timerman said on his Twitter account on Feb. 13. Argentines are sensitive about avoiding a third terrorist attack on their soil after bombings against Jewish targets in the early 1990s, Timerman said in an interview on CNN’s Spanish-language channel yesterday.
 
U.S. Representative Connie Mack, chairman of the House Foreign Affairs subcommittee on the Western Hemisphere, said he thought the government of Argentina made “bogus” claims against the United States for domestic political reasons.
 
“I don’t think the idea that we’re smuggling weapons or drugs into Argentina is credible,” Mack, a Republican of Florida, said in an interview today. “This is just part of the playbook. You make an allegation against the United States and it helps you in your own election, your own country.” When asked if the incident has damaged U.S.-Argentinian relations, Mack said, “I think the relations have been strained in the first place.” Diego Guelar, a former Argentine ambassador to the U.S., said the government intentionally opened a new conflict with the U.S. in return for earlier disputes over Obama’s trip to the region, the WikiLeaks cables and a scandal over the arrival of a Venezuelan-American businessman with $800,000 in his suitcase in 2007. “I think it’s childish, ridiculous, rude and unnecessary,” said Guelar, who currently advises the opposition party PRO on international affairs. “All the country should have done was leave the undeclared cargo on the plane until it could be sent back when the plane departs.”
 
Source
http://www.bloomberg.com

Miradas alternativas sobre combustibles alternativos (Primera parte)

Una doble entrega recorriendo el mundo de los biocombustibles desde sus inicios hasta la situación actual analizada por un grupo de investigadores rosarinos liderados por el Dr. Sergio Montico de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario.
 
 
Por Claudio Pairoba

La necesidad de encontrar fuentes de energía menos contaminantes que las actualmente existentes, sumado al incremento en los precios de combustibles fósiles más las cuestiones geopolíticas que afectan la disponibilidad y los precios de estos últimos constituyen señales de alerta que obligan a buscar combustibles alternativos. Es por ello que en los últimos años se ha generado una gran expectativa con respecto al tema de los biocombustibles.

domingo, 20 de febrero de 2011

Foreign Holdings of Land in Argentina Surge

By Natalia Kidd
 
 
BUENOS AIRES – The number of acres of land in the hands of foreigners in Argentina has almost tripled in the last 10 years, a phenomenon that is spreading to areas that are rich in natural resources and that is affecting small towns that are finding themselves enclosed within the domains of large landholders.

At the beginning of the 21st century, about 7 million hectares (17.5 million acres) were in the hands of foreigners, but this has increased in the past decade to 20 million hectares (50 million acres), according to Argentine Agrarian Federation, or FAA, figures.

The FAA is an association of small and medium farmers who now are demanding that a stop be put to this phenomenon.

“Here, two factors are combining: on the one hand, there is no kind of regulation, and on the other, the price of land in Argentina does not exceed $20,000 per hectare ($8,000 per acre) in the best areas, while in India, for example the cost is 200,000 euros per hectare (about $102,000 per acre),” Congressman Pablo Orsolini, with the opposition Radical Civic Union, told Efe.

Orsolini is working on a bill addressing the issue of foreign land ownership.

The bill, introduced in March, establishes the conditions under which a foreigner may buy land, among which he or she must be a resident, and it limits the amount of land that may be bought: for example, no more than 25 percent of the territory within a municipality or district may be in the hands of foreigners.

The idea of setting limits on the phenomenon of foreign land purchasing also seems to have the approval of President Cristina Fernandez’s administration.

“There has to be a law defending the right for Argentine land to remain in the hands of Argentines,” one of the “main activities” of the country that “will be very much in demand in the future,” Agriculture Minister Julian Dominguez said last week.

The government does not have a bill in preparation on this matter, but it feels that, because of the growing worldwide need to produce food and the resulting search for agriculturally productive lands, “Argentine land must be safeguarded,” Agriculture Ministry officials told Efe.

The largest foreign landholder in Argentina is Italy’s Benetton family, which owns about 900,000 hectares (2.25 million acres), most of it in Patagonia and dedicated to the production of wool for the family’s textile empire.

“But there are many foreigners who don’t buy to produce, but rather to position themselves in places with water, mineral resources and hydrocarbons and in strategic border zones,” Orsolini said.

Currently, the only regulation limiting possession of land on the part of foreigners is a 1944 decree that restricts acquisitions in border areas and zones that are key to national security, a regulation that – according to the lawmaker – is not adhered to.

“For example, Briton Joe Lewis bought lands in Rio Negro and there he built a landing strip 500 meters (yards) from the maritime coast in a national security zone,” Orsolini said.

Lewis, the former owner of the Hard Rock Cafe, became famous locally when he bought 18,000 hectares (45,000 acres) of land in Patagonia and stopped public access to the Hidden Lake paradise, a situation that resulted in a lawsuit.

Other large and famous landowners include U.S. media mogul Ted Turner and U.S. financier George Soros. EFE

Source:
http://laht.com

El conocimiento como bien de exportación

Tres especialistas analizan las perspectivas de los servicios basados en el conocimiento (SBC), un sector en constante crecimiento en la Arg...