Tomado del artículo “7 Essential Principles of Innovative Learning” de Katrina Schwartz, lo que un buen profesor del futuro no debe olvidar:
1-El alumno debe ser el centro de lo que ocurre en la clase
con actividades centradas en su desarrollo y conocimiento, actividades
con las que se implique y así se auto-regulen, controlen sus emociones y
motivación, que se marquen objetivos y sean dueños de su proceso de
aprendizaje.
2-Aprender es una práctica social
que no puede producirse en el total aislamiento. Somos seres sociales y
aprendemos con la interacción. El trabajo colaborativo puede beneficiar
a todos los sujetos, hace que demos lo mejor de nosotros de las maneras
más diversas.
3-Las emociones son parte importantísima
en nuestros aprendizajes: se comprenden mejor las cosas cuando uno está
motivado, interesado; cuando uno comprende por qué ocurre algo, el
nivel de implicación es mucho mayor, el aprendizaje más profundo y
valioso.
4-Todos los estudiantes son diferentes.
Un aprendizaje innovador permite que esas diferencias enriquezcan a
todos los miembros de la comunidad escolar. El estudiante medio no
existe, enseñar lo mismo de la misma forma para diferentes estudiantes
es frustrante.
5-Los estudiantes necesitan que se les exija pero no demasiado, debemos darles margen para que investiguen, descubran, se ayuden, aprendan unos de otros, aprendan otras cosas.
6-Evaluar para aprender, no de lo aprendido. Claro que hay que evaluar, pero de forma que sirva de apoyo a nuevos aprendizajes.
7-Aprendizaje interdisciplinar,
acercándolo a la vida real. Un aprendizaje que uno no sabe para qué le
va a servir, no tiene mucho sentido. Transferencia de aprendizajes y
habilidades en un reto que debemos marcarnos como educadores.
Fuente:
www.theflippedclassroom.es