miércoles, 23 de diciembre de 2009

El "Efecto Árbol Navideño". Y otras historias de Navidad y de ciencia. 3ra parte.


Por Luis Javier Plata Rosas

El último de los tres clones

"El Tercer Clon se aproximaba con paso lento y silencioso. Le envolvía una vestidura negra que le ocultaba la cabeza, la cara y todo el cuerpo. Reconoció Scrooge que el Clon era alto y majestuoso cuando lo vio a su lado. No supo nada más, porque el Clon ni hablaba ni se movía. -Vais a mostrarme las sombras de las cosas que no han sucedido, pero que sucederán en el tiempo venidero -dijo Scrooge-, ¿no es así? ¡Espectro del futuro, os tengo más miedo que a ninguno de los prodigios científicos que he visto! Pero como sé que vuestro propósito es comprender el por qué de las cosas y como espero ser un hombre diferente de lo que he sido, estoy dispuesto
a acompañaros con mi mente preparada. Nuestro destino es el conocimiento.
¡Guiadme!"

La ciencia tiene mucho que decir sobre los efectos que las fiestas navideñas ejercen sobre nosotros. Aprovechando el estilo claro y resumido que caracteriza a muchos
estudios, podemos citar uno de estos efectos: "Cambios en el estatus nutricional en adultos en la Navidad de 1998". Autores: Reid R.; Hackett, A.F. Journal of Human Nutrition and Dietetics. Resumen: Evidencia anecdótica sugiere que la Navidad casi siempre conduce a un balance energético positivo y a un deterioro en el estatus nutricional, pero existen muy pocos estudios. Mediciones antropométricas, de presión arterial y colesterol total de veintiséis adultos fueron realizadas antes y después de las fiestas navideñas. Resultados: Tuvo lugar un incremento en el peso promedio (0.93 kg) a pesar de que cinco sujetos estuvieron enfermos. La presión diastólica tuvo un mayor incremento (8%) en seis sujetos clasificados como ligeramente
hipertensos después de Navidad; sólo dos de ellos lo eran al inicio del estudio. Esto
podría ser explicado por la ingestión de alcohol.

Conclusión: Cambios consecuencia de la Navidad y su corrección merecen mayor
atención. Amén, quizás deberíamos añadir.

Conclusión
"Scrooge investigó más de lo que había dicho. Se hizo tan buen científico, tan buen
maestro y tan buen hombre como el mejor. Algunos se rieron al verle tan escéptico y
cambiado; pero él les dejó reír y no se preocupó, pues era lo bastante racional para
saber que nunca sucedió nada nuevo en este planeta que no empezara por hacer sentir
temor y desconfianza a algunos. No volvió a tener trato con los clones, pero en adelante tuvo mucho más con los amigos y con la ciencia, y siempre se dijo que, si algún hombre poseía la curiosidad de averiguar lo que fuera del mundo natural, ese hombre era Scrooge. ¡Ojalá se diga con verdad lo mismo de nosotros! ¡Feliz Navidad!".

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